Relativamente habitual ha sido la sospecha sobre que algún familiar tenga TDAH, lo cual en algún caso se confirma posteriormente. En algunos esto puede afectar a la convivencia. Encontramos el reflejo de todo ello en las vivencias de Alfonso.
El tema familiar está claro que cuando uno es nervioso, luego por norma general, en un entorno TDA en una familia TDA no suele haber solo un niño, entonces siempre suele haber alguien más, no sé si diagnosticado o no diagnosticado pero por norma general alguno de los progenitores es, alguno de los hermanos también o abuelos, entonces está claro que si es difícil la convivencia con uno pues con más es más complicado todavía, yo creo que se potencia al final el conflicto.