Entrevista 18:
Diagnosticada hace 10 años. Tratamiento con antidiabéticos orales.
Edad en el momento de la entrevista: 81 años.
Sexo: Femenino.
Edad en el momento del diagnóstico: 71 años.
A María Luisa le diagnostican la diabetes en el año 1998 en una analítica que le realizaron por síntomas de cansancio y falta de apetito. Se trata con antidiabéticos orales.
A María Luisa le diagnostican la diabetes en el año 1998. Al sentir cansancio, apatía, desgano y falta de apetito durante un tiempo, decide consultar al médico y al hacerse la analítica le dice que era diabetes. En aquel entonces sabía muy poco acerca de esta enfermedad aunque había oído cuestiones generales por parte de su suegra que la padecía. Le hubiese gustado obtener más información desde los servicios de salud porque considera que le dieron medidas muy generales acerca de cómo cuidarse.
Cuenta que sigue sintiendo cansancio y que suele estar descompensada, que no logra estabilizar los niveles de glucosa. Por las mañanas al levantarse se mide la glucosa y a veces tiene niveles muy bajos de hasta 42 mg/dl.
Dice que trata de hacer una vida normal y cumplir con las prescripciones que se le indican pero la edad y las demás enfermedades que padece es difícil cumplirlo. No obstante, intenta andar y a diario sale a pasear a su perrito y a hacer la compra. En cuanto a la dieta trata de compensar cuando se sale fuera de lo que le indican. Actualmente está en tratamiento con antidiabéticos orales.
Dice estar muy contenta con la atención recibida por el personal sanitario, tanto del centro de salud como del hospital. María Luisa se encuentra en un programa del ayuntamiento para mayores a quienes se les brinda apoyo para el desarrollo de las tareas domésticas para lo cual cuenta con una persona que acude a su casa 2 ó 3 veces por semana durante dos horas. Además tiene acceso a un servicio de atención en el caso de que ocurra una urgencia para poder comunicarse de forma inmediata con el personal del centro de atención primaria. Por otro lado, cuenta con el apoyo de su extensa familia.
María Luisa debe tomar 14 pastillas diarias por diferentes enfermedades y complicaciones asociadas, pero intenta llevar una vida normal y enfrentar sus enfermedades con el mayor optimismo posible.