Entrevista 17

Audio Indicios – entorno TDAH 11

Carme afirma que fue ella quien identificó que podría tener TDAH y comparte el momento en el que sintió que su hijo le pedía ayuda.

"Decían que era completamente normal su actitud, la conducta, que era pues cosas de la infancia, que en un principio él ya conseguiría lo que no conseguía en ese momento. Yo veía, no sé, una serie de falta de organización, de concentración, ... Las instrucciones que recibía en casa, por ejemplo, de normativas u obediencia costaba muchísimo. Después, posteriormente, haciendo deporte la verdad es que la mitad de su infancia la pasó con muletas, con muletas. Tampoco lo encontraba esto normal. Pero la cosa acabó que al final fui yo quien pronostiqué la enfermedad. La pronostiqué, entre comillas, la pronostiqué porque sencillamente Internet te da un conocimiento, un conocimiento global al respecto y fui sumando toda esta serie de cosas, me puse a investigar y resulta que cuando me puse, no me pregunten en qué página era porque comencé a remenar [en el sentido de mezclar] de todo, todo lo que le pasaba a Arnau estaba allí completamente descrito. Y entonces con esto fue cuando fui a la pediatra que tenía entonces y le dije “mi hijo tiene esto, mi hijo tiene esto”. Y a partir de entonces la doctora dice “¿estás segura?” / digo “mire, esto, esto, esto, esto, esto y lo otro”. Sí que es verdad que antes de ir a la pediatra yo hablé con la escuela porque yo veía, con los estudios que tengo de Magisterio, que en la época en que yo ya dije que esto no podía tirar a más y que aquí había algún problema, yo veía que no asimilaba los conocimientos que tenía que tener por su edad dando claro un poco de margen porque no todos los niños maduran al mismo tiempo, pero a mí ya me parecía exagerado. Sobre todo en el lenguaje, sobre todo en el lenguaje. En coordinar a la hora de hablar, en expresarse, a la hora de escribir, etcétera. Y también veía que cuando él se ponía en la mesa a hacer sus quehaceres o sus deberes no estaba el tiempo preciso para hacer una tarea en concreto. Lo que ya me puso antes de ir a la doctora, a la pediatra, a decírselo fue un día estando delante él de sus libros y de su estudio, lo ví tan, tan, tan apurado, lo ví tan apurado que se me giró como pidiendo ayuda y diciendo en catalán decía “no sé qué me pasa mamá, no sé qué me pasa que es que no puedo”. No es más lo que dijo verbalmente sino la forma como lo transmitió, que esto era importante, y la cara que puso, tanto que esto fue lo que a mí fue como una puñalada, como una puñalada en el cuerpo, en la mente, en el alma y fue a posteriori cuando empecé a investigar y entonces ya lo que he contado antes, que ya fui a la pediatra al respecto. Este fue el summum, el summum porque es que yo lo veía que era constante, había algo, había algo, había algo, había algo, había algo, pero este sentimiento que transmitió él en ese momento es como si se se hubiera caído la casa encima completamente. Y francamente me dió mucha pena, me dió mucha pena porque lo ví, lo ví bueno, súper, súper, súper apurado. Porque él quería, ponía los medios, sí se ponía allí a ver qué conseguía pero cuando ya no pudo más y no conseguía nada y supongo que su mente no sé por dónde iba esto fue lo que dijéramos vomitó de esta manera y fue lo que me indujo a ponerme en marcha en este sentido." 

Compartir:

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies
Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Ver
Privacidad