Carmen y Domingo describen las modificaciones de los horarios contra la prescripción médica que aplican con su hijo con tal de frenar su bajada de peso.
C: Come por la mañana antes de tomarse la medicación, desayuna muy bien, y por la noche, a última hora de la noche, cuando ya está despierto mucho rato, claro, lo tengo que acostar a las nueve porque si no lo acuesto a las nueve y media y soy una mala madre porque se acuesta muy tarde y el niño tiene que descansar el cerebro y entonces, claro, es como un círculo que a él le entra hambre. La mala madre, que soy yo, quiero que se acueste un poquito más tarde porque le entra más hambre y quiero que coma, porque pesa 20 kilos. Que el problema si el psicólogo te dice que se acuesta muy tarde el niño "es que el niño se acuesta muy tarde, y no descansa su cerebro" pero mi cerebro descansa, que yo soy la que le educa. Si mi hijo se acuesta cenado, si mi hijo ha comido por la mañana y no ha comido y son las diez de la noche y no ha cenado yo quiero que él coma porque pesa veinte kilos, entonces le dejo un poquito más despierto porque a él le entra hambre, pues eso está mal también. Es una cosa ... Entonces esa medicación le quita el hambre y con la otra medicación le iba muy bien pero, claro, como le cuesta tanto trabajo tomarse dos pastillas al día porque ...
D: Con una ya, vamos, madre mía.