A Victoria le alivia masticar hielo cuando tiene náuseas.
“Pues yo esa noche tenía unos remolinitos de conciencia porque comprendía que estaba siendo muy impertinente pidiendo el agua y el hielo, y `quiero masticar hielo´ y `quiero comer hielo´, y `quiero comer cubitos de hielo.´ Es que sentía una angustia tan grande, pero ante esa seguridad de que te van a quitar esa situación difícil.
E: ¿Y por qué el hielo?
P: El hielo alivia muchísimo las situaciones de angustia de estómago”