Griselda explica cómo tuvieron que dejar de dar alimentos sólidos en los últimos días.
Cuando él se, bueno, se rehizo un poco, le ofrecimos comida, le ofrecimos comida que pudiese tragar, bueno se la, y se la tomó. Otro momento complicado fue, pocos días antes de fallecer, creo que…fue…cuatro o cinco días antes, es que no …, sí, cuatro o cinco días antes, fue cuando…no tres o …no menos, menos, esto fue un jueves o viernes y él falleció el domingo, pues jueves o viernes, cuando del PADES vinieron y dijeron que la situación ya era final, y que ya aconsejaban no…, ir suprimiendo la alimentación y la bebida y hacer curas de la boca dando, mojándola, haciendo…bueno mojándola y dándole … con agua o con agua de tomillo y con agua de limón. Entonces bueno mi madre lo entendió aunque al principio le daba un poco de reparo no darle nada, todavía le ofreció algo de comer, pero bueno, ella intelectualmente lo entendía, porque también lo habíamos elaborado mucho, pero me llamó, me llamó la chica de la limpieza que era la mujer del cuidador, muy asustada porque había venido una doctora y había dicho que no le diesen más de comer al señor. Yo le tuve que explicar que no era que no le dábamos de comer, era que estaba en una situación en que el hecho de darle de comer le podía dar un atragantamiento, que era peor, que la situación, que él estaba tan mal, tan enfermo que él probablemente ya no valía la pena darle, ofrecerle comida, que la situación, pero hubo que un poco darle la vuelta, explicarle, porque para su cultura, aquello era muy chocante.