Rocío apunta otro aspecto del proceso: el dolor de la punción y al mismo tiempo la ilusión de la transferencia.
Hablar con el ginecólogo o la radióloga que te haga la eco “nada, ¿qué tal va?”, ver que crezcan, que no crezcan, que te suban la dosis, que no te suban la dosis, que el Estradiol no sea muy alto, para no hiperestimularte. Luego, cuándo te toca quirófano“ay, dios, los día de abstinencia a ver si mantuve relaciones tal día o no, para traer el semen, tú no me falles con el semen, ay, mi cabeza”. Entonces pues no falla. Y luego ya el día de la punción “tengo miedo a la sedación pero me han dicho que es buenísimo el Propofol” y tal, pues eso, estar allí, la posición ginecológica para la punción que todo el mundo te está viendo… No todo el mundo, vamos a ver, los que trabajan allí: los biólogos, los auxiliares, enfermeros, anestesistas que también lo conoces, … Luego nada, el dolorcito que se te queda después de la punción de los ovarios, una molestia ahí que te dura 24-48 horas, vamos, eso. Y luego el día de la transfer, que es un día precioso, independientemente de la calidad de embriones. Es un día muy bonito porque se presentan lo que son los embriones, te los enseñan en una pantalla, lo miran al microscopio, conectado a una pantalla, te los enseñan “mira, este es uno tiene no sé cuántas células, tal, ves esto tiene fragmentación, no tiene fragmentación, no sé qué, mira este es otro, no sé cuánto”, claro, tú los ves ahí y tú dices “yo los quiero, yo quiero los dos”, entonces “dale gracias a que te pegó uno”, es lo que te dicen: “no, mi niña, porque si es un 30-40% con tu edad, con esta calidad de embriones, un 15, un 20 y date por contenta”. Y la verdad, que vamos, suerte, mucha suerte y mucha receptividad endometrial. Mucha suerte, la verdad. Pero bueno, ese día lo vives muy bien porque ya, pues eso, en la tránsfer te miran con la ecografía abdominal, te ven donde te introducen los embriones con un catéter, en posición ginecológica, lo único te tomas un Valium para estar relajadita, y nada, ves cómo entra el catéter dentro, pones los embriones dentro con la ecografía que te hacen.
Y la verdad que ese día es un día muy bonito, yo creo que es el mejor día de todo el tratamiento. Es lo más bonito, es lo del final, eso es súperbonito, ese día sí es verdad que no se te olvida, todas las imágenes de los embriones, a mí es una cosa que más … es muy bonito, eso es, eso sí es verdad, eso ya es lo último y es lo más importante por supuesto porque ya es el fruto final de haber llegado hasta ahí, y vamos, tan sólo con llegar a la transfer, pues por un lado te das por contento.