Rocío apoya la recomendación de que hay que intentarlo hasta agotar las posibilidades y que hay que saber a qué estás dispuesto y a qué no.
La calidad del óvulo va disminuyendo conforme pasa la edad. Entonces si tú no quieres, nunca has querido y no quieres, y nunca te lo has planteado, por supuesto nunca te lo has planteado porque tú vamos a ver ... entonces si tú nunca te has planteado la ovodonación no esperes, no esperes, a los cuarenta y cinco, cincuenta, para tener un hijo, porque cuando te digan “mire con sus óvulos no sino con óvulos donados", que eso te cae como una patada ...Te cae como una patada porque tú eres guapísima, monísima, simpática, buena estudiante, lo que sea, llegas con cincuenta años con un cuerpazo todo estupendo “¿cómo? ¿óvulos donados? ... perdona, perdona”. Que aquí, vamos, no te sientes menos mujer, te sientes, vamos, por los suelos. Hay otras personas que lo saben, que dicen “no, la fertilidad tiene un tiempo, yo no he querido, no he podido, pues ... a tal edad, pues no tengo reglas ya, vamos pues ponme, voy para la ovodonación, o para embriones donados, yo contenta”. Vale, eso está bien porque aparte es una cosa que tú ya sabes, que tú estás dispuesta, que te gusta y para adelante. Pero el recibir diagnóstico a veces no es del todo lo bueno que tú querrías.
Dice lo ideal es pues eso: de veinte a treinta años, quedarte embarazada de veinte a treinta años. Pues va a ser que no, va a ser que no porque hay que disfrutar un poquito, estudiar un poquito, trabajar un poquito. Todo un poquito. Entonces no se va a poder, entonces yo abogo por los embarazos de treinta a cuarenta. Verdaderamente, si verdaderamente no te has planteado ser madre, bueno, si quieres ser madre por supuesto, pero no te lo plantees con cuarenta. Bueno te lo puedes plantear, te lo puedes plantear y verdaderamente embarazos hay, por supuesto que sí, también hay que ver la tasa de aborto que aumenta con la edad. Pero bueno, pero vamos que hay que plantearse ser madre, si verdaderamente no quieres ningún diagnóstico que tú no quieras, o sea si tú nunca te has planteado la ovodonación porque verdaderamente tú eres una chica que vas y viene, tienes tu vida y ya está, o sea tú tienes tu vida y un día conocerás a una persona o te enamoras, te casas, lo que sea, dices "vamos a tener un niño". Y ahí es cuando ya te planteas todo, por eso, hay señoras de cincuenta años que dicen “ahora encontré el amor de mi vida, me casé y digo ¿y ahora? ¿no puedo tener niños? ... pues no me parece". Pues venga, pues para adelante. Claro, se mira todo que esté perfecto: prueba de esfuerzo, exploración cardiológica, ecocardio, electrocardiograma, prueba de glucosa y tal, y luego si todo ok para adelante. Vale, pero verdaderamente sí es verdad, o sea, las condiciones biológicas y las condiciones sociales son diferentes.