Hay quien como Elena agradece que cuando recibe las explicaciones en consulta, al igual que otras importantes ya vistas como ser bien tratada y que se adapten a su nivel de conocimientos se cumplan, luego no cometan el error de generarle falsas expectativas.
Sí, o sea, al final donde hicimos el tratamiento eran médicos que estaban también en la Seguridad Social. Y la otra donde hicimos la consulta primera, esa no, eran médicos privados y ahí sí que no sé a mí me gusta que me traten pues no sé, con, que sean realistas, que me digan las cosas tal y como son a mi nivel, evidentemente, pero que me cuenten las cosas tal y como son. Y ahí, ya te digo, en esta en concreto, era como un trato muy exclusivo, un trato aquí pues te hablaban mucho de la confidencialidad de que procuraban que no te encontraras con otra gente que no sé qué, yo a eso, por ejemplo, pues no le doy tanta importancia y sí le doy a que me digan las cosas claras y allí era pues eso, desde la primera visita que “sí, sí, tu tranquila que ya verás que te vas a quedar embarazada” y era como bueno, pero, ¿y si esto no funciona? Porque eran tratamientos además a precio cerrado digo “vale, pero si yo necesito esto” / “nada, tú no te preocupes”. No, no me preocupe, no, yo quiero saber todo cómo funciona “¿y si no funciona, y si no va bien?” / “no, tranquila que ya verás que va bien”. No, el cómo va a funcionar todo esto. Entonces a mí esa en concreto no me gustó.