María del Pino explica que con la quimioterapia y su esfuerzo consiguió que mejorara el dolor.
“Jolines si yo me pongo estoy mala, mañana estoy bien, o pasado mañana estoy bien.´ Pero no, no, qué va. Y era un día tras día, llorando, sin llorar y pensando en mis hijos y … Eso es lo que me ha hecho a mí vivir, porque si no, si no hubiera sido por mis hijos, yo me hubiera dejado, porque sufrí mucho, mucho, mucho. Y era horrible el dolor. Los médicos hicieron todo, todo, y lo único que tenía era dolor y dolor. Como dicen ` ya no le podemos hacer más nada.´ Y mira, con la quimioterapia y haciendo un poquito de esfuerzo y eso, se me fue el dolor y se me fue todo. Y que los médicos no se lo creían.”