Francisco consiguió retirar el tratamiento con insulina y comenzar con antidiabéticos orales cuando redujo su peso.
Fue cuando me quitaron la insulina y me mantuvieron con la pastilla. Llegué a pesar los 120 kilos que estoy ahora. Después fui a ponerme el plan de comida, de la insulina, seguía con mis pastillas, pero al no seguir el plan, el tratamiento, no me siguieron el control de la diabetes porque yo creía que ya estaba curado. Ya no puedo seguir con el mismo ritmo de vida que tenía antes, seguía con mis entradas, mis salidas, no tener un control estricto como el que tenía antes, como lo tengo ahora.