Romelia y su marido han intentado hacerle ver a su hijo lo que las apuestas online implican.
"Tiene quince años y sé que es responsable. Mientras yo venía del trabajo y mi hija ya bajaba, en el transcurso, entonces ese esfuerzo que él ha hecho se lo he pagado y entonces me ha dicho “mamá, quiero ponerle dinero a la (nombre videojuegos)” y le digo “pero ¿cuál es el objetivo?” y él me dice “para jugar en línea”. Entonces mi marido le explicó y nos dijo “déjamelo sólo experimentar”. Los diez euros se los gastó en menos de media hora y encima perdiendo entonces él no se explicó y yo le dije “mira, ¿ves? diez euros en nada, si hubieses cogido esos diez euros y te hubieses ido a comer algo o a cualquier sitio -porque los miércoles, normalmente, solemos ir al cine- ya podríamos ir al cine”. Le dejamos que él vea qué es lo más productivo pero tampoco que vaya a decirnos cada semana que va a meter diez euros, o cada tres días. No, hemos dicho que las apuestas o cosas de estas no son buenas porque no te trae nada bueno. Lo bueno es que él es obediente y dice “sí, sí, ya lo entiendo”."