Cuando se pregunta por las recomendaciones a otras personas de su entorno nos responden explicando lo que les pedirían: fundamentalmente piden paciencia, apoyo en las tareas que les resultan complicadas y usar el refuerzo positivo. La forma más adecuada para conseguir todo ello, opinan, es que el entorno entienda lo que significa el diagnóstico y la vivencia de TDAH en primera persona.
Pablo solicita paciencia y apoyo a la familia cercana con la que se convive así como a otros/as familiares.
Patricia coincide en el mensaje de paciencia a la familia y en su caso también a las amistades aclarando que, por sus particularidades, el TDAH en sí la requiere dado que su tratamiento o su adaptación suele necesitar de plazos más largos.
Asociado a la paciencia Raquel pide que no se comuniquen a gritos para evitar bloquearse.
Virginia aconseja al entorno prestar su colaboración en tareas que no les resultan fáciles a las personas diagnosticadas de TDAH, como por ejemplo en su caso los trámites burocráticos.
Patricia habla de practicar el refuerzo positivo.
Conocer el TDAH y saber qué hacer en cada momento como facilitar tranquilidad a la persona que la tiene son otras de las observaciones que trasladarían a su entorno.
Pol considera que para ello deben acceder a más información.
Josep María valora que cuanto más sepan más técnicas de manejo en la convivencia con personas diagnosticadas de TDAH tendrán, incluida la comprensión de sus demandas de desconexión y tranquilidad.
O como apunta Andrés, quien añade otra perspectiva, así sabrán que no deben frustarse ante momentos de poco avance de su hijo/a, por ejemplo.